La economía mundial se vio derrumbada por la crisis generada por la pandemia del coronavirus. La actividad económica en Estados Unidos no fue una excepción. Sin embargo, el mercado inmobiliario de USA es uno de los sectores que mejores señales presenta en el gigante norteamericano pese a la pandemia del coronavirus. La expectativa guarda relación con la capacidad de adaptación del negocio y la demanda habitacional que es sostenible.
Diversos factores son los que explican la sostenibilidad del negocio inmobiliario en Estados Unidos. El primer de ellos guarda relación con las políticas gubernamentales establecidas para evitar el impacto negativo del coronavirus. El de la construcción y el de bienes raíces fue uno de los sectores que fueron menos restringidos por la cuarentena.
Sabemos también que el Gobierno resolvió una serie de medidas para proteger a los sectores más vulnerables. Si bien la medida bajó las expectativas de los inversores, dado que los inquilinos tienen la posibilidad de no pagar porque hay una normativa que los protege y prohíbe los desalojos, el negocio viró hacia otros escenarios más redituables.
Estas medidas lejos de decrecer el negocio de bienes raíces hizo de la crisis, una oportunidad, particularmente cuando hablamos de lugares como el Metro Detroit de Michigan.

¿Cuáles son las características del Metro Detroit de Michigan?
El Metro Detroit es una de las regiones más atractivas en el negocio inmobiliario de Estados Unidos. En la también conocida Área Estadística Metropolitana de Detroit-Warren-Livonia viven más de 4 millones de habitantes. Se trata de una clase media-media alta de profesionales con características de consumo particulares. La que más nos atañe es que prefieren alquilar.
Asimismo, dada la capacidad del poder adquisitivo de sus pobladores pudieron continuar con sus compromisos de alquiler. Por eso, si bien la renta es menor el negocio es asegurado dado que tienen posibilidades de pagar.
Esta situación ha consolidado una tendencia que se venía viendo desde hace años. Detroit se presentaba como una gran opción para todos aquellos que quieran apostar al negocio de Real Estate en USA. Dadas las características de sus propiedades y los retornos de inversión anual cercanos al 10 por ciento la ponían por delante de otros escenarios como Miami o Nueva York, que por cierto, en esta pandemia se vio fuertemente afectada.
Y dado que las personas prefieren optar por escenarios más alejados de la ciudad donde la tranquilidad sea un plus, el Metro Detroit de Michigan se convierte así en uno de los escenarios que lideran el ranking de buenos dividendos en el negocio de Real Estate.
La clave de invertir en bienes raíces
Sumada a las características del mercado norteamericano relativas a la seguridad financiera, la estabilidad y el clima de apertura para la inversión, el sector inmobiliario históricamente ha demostrado ser elástico convirtiéndose en un excelente refugio de capital para aquellos inversores que quieran tener retornos atractivos.
Ahora bien, si ajustamos la lupa en este negocio encontramos una serie de características que se destacan, en especial para los inversores latinoamericanos. El primero guarda relación con la propia divisa norteamericana: aquí el dólar camina sin restricciones.
El segundo, tiene que ver con las reglas claras. Solo se invierte en aquellas propiedades que tengan garantía de retornos. Por eso, se hacen exhaustivos controles e inspecciones necesarias para conocer la calidad y condiciones de la vivienda.
Por último, la demanda habitacional sostenible. Los jóvenes a diferencia de sus padres y abuelos no tienen en mente “el sueño americano” de tener una casa. Por eso, optan por alquilar. Asimismo, a ser profesionales con ingresos por encima del promedio su capacidad adquisitiva está asegurada.
Por todo ello, el sector de Real Estate se prepara para superar los embates del coronavirus.
Dado que las expectativa siguen intactas la opción por el negocio de bienes raíces en Estados Unidos sigue siendo de las más atractivas, superando a muchas herramientas financieras, como bonos y acciones.